Análisis de los resultados de las Elecciones 2016 (PNP)

Partido Nuevo Progresistaimagesuszigypn

La prensa escrita, radio y televisión publicaron durante todo el día 8 y el 9 de noviembre sobre el triunfo de Ricardo Rosselló a la gobernación de Puerto Rico.  Fueron muy pocos quienes miraron los resultados detenidamente como para, aparte de reconocer el rechazo amplio a los tres partidos políticos, notar la debilidad del gobernador electo en apoyo popular.  ¿Puede el Partido Nuevo Progresista hablar de triunfo en 2016?  Por supuesto que no, es más, podemos asegurar que, aunque el PNP se quedó con Cámara, Senado, La Fortaleza y la silla de la comisaría residente en Washington DC, en realidad ese partido salió más debilitado, con todo ese dominio, que con la derrota electoral del 2012.  A primera vista, este análisis sobre el PNP puede parecer difícil de entender para algunos e inaceptable para otros, pero los números hablan por sí solos.  Es más, Jay Fonseca fue de los pocos que notó, aunque no muy profundamente el desgaste del PNP.

Ricky Rosselló se perfilaba por todas las encuestas y por lo que se podía sentir en la calle y en la campaña, no solo como el candidato vencedor sino como un candidato que podría borrar del mapa al Partido Popular.  Sin embargo, los resultados fueron otra cosa.  Ya desde las primarias que el PNP celebró para elegir su candidato a La Fortaleza entre Ricky Rosselló y Pedro Pierluisi, se pudo constatar que la historia de un Ricky Rosselló invencible y que claramente contaba con el abrumador apoyo de los propios penepés y estadistas, era tan solo un mito.

imagestp3wtavv Luego de las primarias, el PNP se dedicó a una extensa campaña de medios para todos sus candidatos.  El gasto de millones de dólares en afiches, guaguas de sonido, comités de campaña y, sobretodo, anuncios televisivos fue enorme.  A leguas se notaba que la calidad y la cantidad de los anuncios, tanto de Ricky como de Jennifer González (J-Go), superaban al PPD, a los demás partidos y a Alexandra Lúgaro que no presentó un solo anuncio ni utilizó fondos públicos.  Todo ese esfuerzo y gasto del PNP desembocó en el domingo, 6 de noviembre cuando el PNP cerraba su campaña en las inmediaciones del Centro de Convenciones.  Las fotos y videos de esa actividad dejaron ver cómo las multitudes que ese partido arrastraba a este tipo de actividades no respondieron de igual manera.  Aunque el espacio dedicado al cierre se llenó, era notable que cierres anteriores del PNP habían tenido la capacidad de desbordar esos espacios y de tener una masa compacta de personas.

Ya el martes 8 de noviembre el país acudió a las urnas para elegir al administrador de la colonia y al empleado de la Junta Imperial de Control Fiscal.  Con un nuevo sistema de votación mecanizado, las filas fueron inmensas, pero los resultados se conocieron con mucha mayor rapidez.  Desde temprano, Ricardo Rosselló estuvo en la delantera por un margen ridículo para lo que se esperaba.  Al final del día los resultados favorecieron al PNP, el cual obtuvo 655,626 votos (41.7%) para Ricardo Rosselló y 713,605 votos (48.7%) para J-Go.  Con estos resultados en las costillas, Ricky Rosselló, distinguido por decir una animalá cada vez que abre la boca, dijo que traería la estadidad porque tiene un mandato del pueblo.  El mandato del que habla Ricky se trata de ser el primer gobernador en décadas en dirigir a Puerto Rico con casi un 60% de oposición sin haber comenzado a gobernar. ¿Realmente alguien cree que el PNP tiene un mandato para ir a rogar por la estadidad?

Luis A. Ferré llevó al PNP a su primer triunfo con 43.6% de los votos, cuarenta y ocho años más tardes y por primera vez en su historia, el Partido Nuevo Progresista no llegó al 42%.  Esta realidad se hace más llamativa si consideramos que el PNP se enfrentó a un Partido Popular destruido al enfrentar el llamado voto castigo por un gobierno desastroso en sus manos entre 2012 y 2016, por la confirmación de la inexistencia y del engaño del estado libre asociado que deja a ese partido en un limbo, de contar con un candidato, David Bernier, realmente débil, y por el caso de corrupción de Anaudi que arropó a todo ese partido.  Ni aun así, el Partido Nuevo Progresista logró enterrar al PPD, más bien ambos partidos sucumbieron, por vez primera en la historia, tras el abandono de cientos de miles de sus votantes.  La llamada base o corazón del rollo del PPD, del PNP y del PIP se redujo sustancialmente.

No obstante, la cosa no se queda ahí.  La campaña del PNP en 2016 giró principalmente en torno al status político del País.  El PNP, al igual que el PIP, por estrategia decidieron tornar las elecciones en unas plebiscitarias con la esperanza de amarrar el voto de sus respectivas ideologías, con el evidente fracaso de ambos.  Podemos ver este resultado de dos maneras: primero, Ricky Rosselló quedó muy por debajo del apoyo con que cuenta el anexionismo en Puerto Rico; segundo, nuevamente, al igual que en el 2012, la estadidad recibió el rechazo de la mayoría del electorado y no logró movilizar al pueblo (leer: A un año de laderrota de la estadidad en Puerto Rico).  Ricardo Rosselló ganó la gobernación con más de 200,000 votos menos que cuando Luis Fortuño las perdió en 2012, también con una campaña anexionista, y por más de 350,000 votos menos respecto a las elecciones de 2008.  Si comparamos los resultados de Ricky con los otros candidatos del PNP a la gobernación los resultados son igualmente chocantes e, imaginamos desoladores, para el anexionismo.  Ricky Rosselló obtuvo alrededor de 250,000 votos más que Ferré hace casi medio siglo atrás (1968); 92,000 votos más que Ferré (1972); 48,000 votos menos que Romero Barceló (1976); y más de cien mil votos menos que ¨el Caballo¨ hace más de 35 años atrás.

Lo expuesto en los párrafos anteriores basta para destruir el mito de un Partido imagesw5mmuou2Nuevo Progresista fuerte y de un anexionismo creciente en Puerto Rico.  Pero es interesante notar que los números obtenidos por Jennifer González para ocupar la silla de comisionada residente, tampoco fueron espectaculares.  Podemos decir que fue muy llamativo que lograra la victoria ante Héctor Ferrer del PPD, por poco más de 20,000 votos, una ventaja exigua.  Si se esperaba que Ricky Rosselló triunfara abrumadoramente sobre Bernier, las expectativas con J-Go eran mayores ya que se pensaba en una victoria mayor sobre Ferrer, quien tuvo una campaña por mucho más modesta.  En resumen, J-Go va a Washington DC con menos del 50% del apoyo y con la realidad clara de que no es tan fuerte como la pintaron.

No podemos analizar los resultado pueblo tras pueblos, así que terminaos con San Juan.  La alcaldía de la capital fue en estas elecciones la más codiciada por el PNP y su candidato Leo Díaz.  En este caso fue diferente, se esperaba la victoria de la alcaldesa Carmen Yulín Cruz, lo que no se esperaba era que la líder popular ganara por tanto y, además, ampliara su ventaja sobre el PNP respecto a las elecciones de 2012.  Leo Díaz realizó una campaña mucho más agresiva por todos los medios.   Muchos opinaron que Carmen Yulín ni siquiera hizo campaña. La estrategia de Leo Díaz estaba dirigida a capturar el voto conservador, proyectándose como un ¨hombre de familia¨ y defensor de los ¨valores¨ tradicionales.  También se presentó a Carmen Yulín como socialista, separatista y dirigente de protestas ¨anti americanas¨.  Nada de eso le sirvió, solo obtuvo 63,345 votos (43.7), frente a los 78,509 votos de Carmen Yulín, quien obtuvo mayoría absoluta al superar el 52% de apoyo del electorado sanjuanero.

Con una campaña de miedos y enfocada en capturar el voto fundamentalista, Leo Díaz y el PNP perdieron en San Juan más del 3% del electorado.  ¿Por qué analizamos los resultados de San Juan?  Es simple, esa elección de Carmen Yulín representó el triunfo de la líder más visible del ala soberanista del PPD y demostró dos cosas que deben servir de lección al Partido Popular: que no hay que dejar de apoyar la soberanía de Puerto Rico para ganar una elección y que las campañas de miedo del PNP ya no les funcionan como antes.  Oído en tierra…

Dios los cría…

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Para el PIP los del MINH ayer eran populetes, traidores, melones y colonialistas.  Hoy son patriotas solo por dar el endoso a la franquicia de Rubén y su grupito.  Como los perros, pelean, se ladran y luego se huelen los culos.

El fenómeno de las candidaturas independientes a la gobernación

cropped-hoho.pngLas elecciones generales de 2016 en Puerto Rico son las más claramente coloniales que se recuerden desde mediados del siglo XX hasta hoy.  ¿Elecciones? No. En realidad, lo que sucederá el 8 de noviembre será una gran encuesta.  Nadie sabe de qué trata la encuesta ya que unos la quieren pintar como una consulta de status, otros como un ejercicio a favor o en contra de la Junta Imperial de Control Fiscal y otros la ven como un concurso de quién es la más bella, cuál es inteligente y quiénes los brutos, entre otras cosas.  Al final del día, ya Estados Unidos dictó que una junta de siete, no electa por el pueblo, tendrá más poder que el gobierno de Puerto Rico y, como diría don Pedro Albizu Campos, las elecciones coloniales son una trampita que no adelanta el bienestar de la nación puertorriqueña y legitima el sistema colonial estadounidense.

Pero, si analizamos el fenómeno que cada carnaval electoral levanta, en definitiva, 2016 es un año electoral diferente.  Aparte de los tres partidos tradicionales (PPD, PNP, PIP) y de la vuelta del pepito (PPT), hay dos candidatos independientes en la disputa por La Fortaleza.  Y no son dos candidatos cualesquiera, Alexandra Lúgaro y Manuel Cidre están haciendo historia por el gran interés y apoyo que sus candidaturas han despertado.  Para sustentar esta aseveración basta con mirar las redes sociales, las encuestas y, sobretodo, la reacción de los candidatos y partidos de la vieja política.  Veamos brevemente cómo ha sido la reacción de esos partidos y candidatos.

Primero, hay que dejar establecido que los ataques contra las candidaturas independientes se han centrado contra Alexandra Lúgaro.  Esta candidata aparenta ser la preferida entre los electores que se niegan a seguir apoyando al PPD y al PNP.  Además, este artículo no se centra en los ¨pros¨ o ¨contras¨ de Lúgaro o Cidre ni en si son diferentes al PPD o PNP, aquí solo hablamos de la reacción de los partidos políticos tradicionales ante estas candidaturas independientes.

Comencemos por el Partido Nuevo Progresista y su candidato Ricky Mitocondrio Rosselló.  El PNP ha tenido la reacción más fría hacia Lúgaro.  A pesar de que no se han visto muchos ataques públicos contra ésta, sí fue llamativo que Ricky Rosselló decidiera adoptar propuestas de los candidatos independientes.  Esto se debe a que el PNP se sabe al frente en las encuestas y a que un partido corrupto como el PNP se conforma con ganar el poder, aunque sea perdiendo una parte grande del apoyo de su base.  Los más recientes sondeos colocan al PNP y a su candidato a la gobernación con un 40% del apoyo del electorado.  Este número es revelador ya que el PNP no tiende a bajar de un apoyo del 46 al 48 por ciento.   ¿A dónde se fueron esos más 100,000 electores penepés?  Demás está decir que no han ido a apoyar a David Bernier ni al PIP ni mucho menos al fantasma PPT.  Esos miles de electores estarán, o quedándose en sus casas o apoyando a uno de los dos candidatos independientes.

Por otro lado, se ha visto una movida en el PNP de insertar la estadidad en el debate.  El fin es más que claro, el liderato anexionista sabe que la estadidad es imposible y que el apoyo a la misma no crece, pero también sabe que, históricamente el voto estadista ha sido bastante monolítico a favor del partido que los representa.  El PNP busca desesperadamente amarrar el voto del anexionismo y asegurarse al menos un 46% de los votos.  Si la cosa madura como pinta, les espera un cantazo desde la base.

En el caso del Partido Popular Democrático, la reacción ante Alexandra Lúgaro ha sido más visible.  El PPD ha publicado imágenes en las redes sociales donde comparan a su candidato, David Bernier, con Alexandra Lúgaro.  Lógicamente, resaltan los aspectos negativos de Lúgaro frente al ¨exitoso¨ Bernier.  Por otro lado, el propio David Bernier ha reconocido en los medios la fuerza con la que vienen los candidatos independientes a la gobernación.  Se llegó a rumorar que el Partido Popular le ofrecería un alto puesto en el gobierno de Bernier a Lúgaro, a cambio de su endoso a la candidatura popular y al retiro de la propia.  En resumen, que dos monstruos como los hegemónicos PPD y PNP estén hablando en plena recta final de la campaña de una candidata independiente, sin maquinaria electoral y son los millones de dólares que ellos disfrutan para publicidad, es más que revelador: es histórico.

El PIP no se ha quedado atrás.  Este partido moribundo busca como un sediento en el desierto el logro de la inscripción de la franquicia electoral.  Los tiempos en que el PIP enfilaba sus ataques contra el PPD de manera casi exclusiva pasaron.  En el 2008 se pudieron dar el lujo de ignorar al PPR y a Rogelio Figueroa y fueron vencidos por éste.  En el 2012 intentaron ignorar al PPT, más bien al fenómeno Bernabe.  Pero en 2016 les ha sido imposible dejar de lado a Alexandra Lúgaro y en menor medida a Manuel Cidre.  Desde el año 2004 el PIP no logra quedar inscrito al no obtener el mínimo necesario de apoyo.  En el 2012 este problema del PIP se agravó ya que por primera vez en la historia se pudo observar cjkhiuuilaramente cómo el apoyo a la independencia casi duplica el apoyo que obtuvo el PIP, lo que significa que una enorme parte de los independentistas que salen a votar, no apoyan a la franquicia verde.  El PIP creyó que postulando una mujer serían el centro de la atención, pero llegó Lúgaro.  María de Lourdes Santiago es la última carta del PIP y ha sido, hasta ahora, un fracaso.

La estrategia del PIP ha sido enfilar sus cañones contra Lúgaro a través de sus seguidores en las redes sociales y a través de ataques de María de Lourdes contra Lúgaro.  Pero el PIP sabe que poco puede hacer para restarle apoyo a Cidre o a Lúgaro y ha revivido la trampita de que las elecciones son plebiscitarias.  Desde la década de los 80  el PIP decía que las elecciones no son plebiscitarias y que un voto por el PIP no es un voto necesariamente por la independencia, ahora se contradice.  El liderato pipiolo sabe que la única forma de quedar inscritos es si los independentistas, dejándose llevar por el cuento de las elecciones plebiscitarias, dieran todo su apoyo al PIP.  Por esto, en los debates y en todo María de Lourdes no para de hablar de independencia como solución hasta para una diarrea.

El PIP se tendrá que conformar con un cuarto o quinto lugar y los buenos independentistas al reto de si superan a un liderato que se ha convertido en una piedra en el camino a la independencia.  En cuanto pasen las elecciones correrán a inscribirse sin análisis, sin democracia y si participación de la base.  El PPT, el PPT está por ahí…

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Circula por las redes sociales una imagen en la que María de Lourdes Santiago, candidata a gobernar la colonia por el PIP, se burla de David Bernier al no entender una de las ridículas propuestas del Partido Popular.  Pero lo que está de fondo en la actitud de la candidata es la tradicional actitud de superioridad y altanería que caracteriza al liderato pipista.  En este meme se le calla la boca y se le baja el moco a la diva del Pipfunto.

Al boicot de las elecciones coloniales 2016

hohoEl boicot organizado y con conciencia de las elecciones coloniales en Puerto Rico es el camino que debe asumir todo puertorriqueño y puertorriqueña que realmente desee repudiar el sistema antidemocrático del colonialismo, la imposición de una Junta Imperial que sin ser electa gobernará y la debacle de la política electorera y cooperacionista de las franquicias electorales que llaman partidos políticos.  Nunca antes en la historia de Puerto Rico las elecciones de los administradores de la colonia se han revelado más inútiles y vergonzosas.  En la calle es palpable el descrédito del circo electoral y el 2016 se perfila como el año más soso que pueda recordarse de todos los años electorales.

Ante el cuadro presentado arriba, el gobierno y los medios de comunicación han arreciado su campaña para que las masas salgan a votar por quienes NO gobernarán el país.  A diario, se escuchan las típicas frases de “vota o quédate callao”, “si no votas no tienes derecho a quejarte”, “tu voto será contado”.  ¿Por qué esta campaña incesante?  Es sencillo, el sistema colonial tanto a nivel nacional como internacional se continúa sustentando en crear una apariencia democrática que mantenga al pueblo desmovilizado, con la esperanza, aun de aquellos que repudian el colonialismo en cualquiera de sus manifestaciones, de que participando en elecciones coloniales pueden avanzar sus objetivos.

La participación en un sistema antidemocrático no solo lo avala, sino que engaña a quienes creen que así adelantan la descolonización.  Nada más lejos de la realidad, para que ello pudiera ser en parte posible, las opciones que defienden la independencia, la soberanía y la justicia social necesitan un apoyo grande del electorado.  Sin embargo, los resultados hablan por si solos, el carnaval electoral no solo no ha adelantado esos objetivos, los ha detenido ya que, como se menciona arriba, crea una falsa imagen democrática en el opresor, permite que las franquicias electoreras terminen lucrándose del sistema y, sobretodo, desmoviliza al pueblo.  Como dijo don Pedro Albizu Campos, las elecciones y las inscripciones en Puerto Rico son una «trampita».

Gane quien gane, votes por quien votes, ya Estados Unidos dictaminó en quién recaerá el poder, en la llamada Junta de Control Fiscal que no viene a enderezar las finanzas de la colonia maniatada ni viene a fijar responsabilidades sobre los políticos y empresarios que han ido quebrando al País.  La Junta viene a asegurar el pago a los ricos, nada más.  Salir como mansos corderos a depositar nuestras esperanzas en las urnas del imperio es renunciar a encaminar una lucha renovada contra ese sistema.

El no votar en las Elecciones Generales de 2016 teniendo en mente que es la forma más urgente de repudiar la colonia y la corrupción no significa no estar interesados en la política y en el futuro de nuestro país, sino todo lo contrario.  ¿Nos dan a elegir entre votar o quedarnos callados?  O, ¿estamos votando y haciéndonos cómplices?   ¡NO VOTES, NO DEJES QUE TE SILENCIEN!

NO a las elecciones coloniales, NO a la Junta

iughjkdvLa realidad de todas las elecciones realizadas en Puerto Rico es que son coloniales y antidemocráticas. Sin entrar en mayores detalles, son antidemocráticas porque el pueblo elige funcionarios que estarán sometidos a los dictámenes de otro país, dictámenes que no responden a los intereses del desarrollo político, económico y social de Puerto Rico. A esto hay que agregar que sobre nuestro país aplican leyes aprobadas por un Congreso y un presidente por el cual no hemos votado. Pero en las próximas elecciones de noviembre de 2016, el carácter dictatorial, colonial y vergonzoso del proceso se profundiza. Los partidos políticos y candidatos independientes quieren que el pueblo participe de un carnaval electorero que no solo le da legitimidad a la colonia sino que será una pérdida de tiempo ya que se nos impone una Junta de Control Imperial que es quien viene a dictar cómo se gobierna, qué se hace y qué no. El camino es el boicot electoral masivo para encaminar una lucha más estable y legítima contra la colonia.

Junta Federal de Control Fiscal: colonialismo y dictadura al desnudo

images (28)La Junta Federal de Control Fiscal que el gobierno de Estados Unidos pretende imponer a Puerto Rico no es más que la colonia al desnudo.  En medio de la crisis económica que vive Puerto Rico (bajo dominación estadounidense) no es momento para que el poder imperial cree palabras y frases que intenten encubrir el colonialismo como ha sido la regla, qué mejor ejemplo que esa aberración llamada «estado libre asociado», ahora se puede hablar de una junta de control fiscal sin mayores explicaciones ni adornos.  Estamos presenciando el hundimiento del ELA, y el gobierno de Estados Unidos y sus lacayos en Puerto Rico solo buscan salvar los intereses de los ricos y de las grandes corporaciones estadounidenses que de nuestra tierra arrancan miles de millones de dólares en ganancias de una economía cautiva.

Es sencillo, para salvar el dinero de los ricos, Estados Unidos hará lo necesario.  Pero, ¿qué es lo necesario? Lo necesario es quitarse la máscara e imponerle al pueblo puertorriqueño una “junta” a la que el país no ha elegido para que decida cómo se maneja el dinero del pueblo.  Para ver de manera sencilla las atribuciones que tendría la llamada Junta de Control Fiscal, mencionaremos varios ejemplos.  La Junta de Control Fiscal estaría compuesta de cinco personas nombradas por el presidente de Estados Unidos.  Esas cinco personas se atribuirán el poder de decidir antidemocráticamente sobre la utilización del presupuesto y su aprobación.  En otras palabras, el gobernador y los legisladores serán sus empleados y no funcionarios electos por el pueblo para administrar el dinero público.  Estados Unidos, país que tanto gusta de andar por el mundo dando recetas de democracia, en su colonia se salta las reglas con el fin de garantizar que los bonistas reciban su pago, aunque la calidad de vida del pueblo empeore cada día más.

En cuanto a la aprobación del presupuesto, el pequeño club de los ricos que llaman Junta de Control Fiscal es quien realmente decide, no los funcionarios electos por el pueblo.   El gobernador de Puerto Rico, sea quien sea, primero tendrá que presentar a la Junta sus planes presupuestarios y si ésta lo aprueba, entonces se somete a las cámaras legislativas.  La Junta, además, fiscalizará que el presupuesto aprobado cumpla con sus órdenes, de lo contrario el gobernador tendrá un plazo de quince días para obedecer las órdenes imperiales.  Una vez la Legislatura trabaje con el presupuesto que le presente el gobernador (el cual a su vez debe seguir las directrices de la Junta), ésta debe, con un mes de antelación presentar el presupuesto que será sometido a aprobación a la Junta de Control Fiscal para, en arroz y habichuelas, pedirle permiso para convertirlo en ley.  La cosa no queda ahí, la Junta de Control Fiscal tendrá poder para prohibir transacciones que excedan los $100,000 e imponer recortes.

Por supuesto, la Junta Federal de Control Fiscal no viene a velar por el buen uso del dinero del pueblo.  Su verdadera y única tarea es velar por los intereses económicos de la banca, los fondos buitre, los bonistas y las grandes corporaciones extranjeras.  Para lograr su fin, la Junta Federal de Control fiscal no posee una varita mágica, para lograrlo será necesario aplastar aún más a la clase trabajadora y a los pobres que somos la absoluta mayoría y quienes movemos el País, entiéndase despidos, recortes en educación, salud, más impuestos, recortes de derechos a la clase obrera, encarecimiento de los productos, en fin, una penosa lista que solo toca a la clase trabajadora y a los pobres.

Lo anterior es prueba, no solo de que vivimos bajo un sistema colonial sino que también vivimos bajo una dictadura del capital.  Aquí se hace lo que el imperio y los ricos digan.  Si alguien creyó que el ELA había acabado con que nos mandaran desde afuera, aquí tiene otra bofetada a ver si despierta.  La Junta Federal de Control Fiscal del siglo XXI no tiene nada que envidiarle a aquellos días en que el presidente de EEUU nombraba a los gobernadores de Puerto Rico.  El circo electoral de noviembre de 2016 cumplirá  con su cometido, por un lado legitimar el gobierno de los ricos y de la colonia con una falsa democracia, y continuar desmovilizando al pueblo por el otro.  En este momento histórico una manera de poner en entredicho  el sistema es deslegitimarlo.  La participación en la trampita de las elecciones coloniales (como las llamaba Albizu), es seguir bailando al son de las cadenas.  Por supuesto, el boicot a ese andamiaje colonial de las elecciones debe estar acompañado de la acción en la calle.

Complicidad pipiola contra candidaturas independientes

hjgbigbigbipugA mediados de noviembre de 2014, todos los medios de prensa del País publicaron sobre la Reforma Electoral aprobada en la legislatura colonial.  Un vistazo a las noticias sobre este asunto pone de manifiesto que los partidos políticos y la prensa dieron mayor importancia a algunos puntos de la Reforma e ignoraron otros.  Entre estos puntos destaca el cambio de fecha en las primarias al mes de mayo del año electoral provocando el acortamiento del proceso, los cambios en la asignación de fondos públicos para financiar partidos políticos y la campaña de sus candidatos a la gobernación y, además, una breve mención de la reducción en la cantidad de endosos requeridos a los aspirantes partidistas en las primarias.  ¿Por qué les hablo de la Reforma Electoral aprobada en 2014?  Es simple, el tema cobró notoriedad a finales de enero e inicios de febrero de este año electoral 2016 debido al justo reclamo que el doctor Vargas Vidot ha levantado sobre la injusticia y desigualdad de la Comisión Estatal de Elecciones a la hora de tratar con candidatos de su club de partidos políticos frente a las candidaturas independientes.

La Reforma Electoral fue aprobada en la legislatura dominada por el Partido Popular y con el voto a favor de la senadora del Partido Independentista Puertorriqueño, María de Lourdes Santiago.  Lo que no se discutió o reportó en la prensa nacional fue la estocada que el trío rojo, azul y verde dieron a los partidos emergentes a la hora de asignar fondos públicos pero, sobre todo, la doble vara en los requisitos a aspirantes de las maquinarias partidistas frente a quienes intentan presentar sus candidaturas de manera independiente.  En este artículo no pretendo hablar de las cualidades del doctor Vargas Vidot que lo convierten en el candidato más sobresaliente y probado para entrar a la Legislatura como Senador por acumulación.  La trayectoria de servicio público a los sectores más marginados del País, el conocimiento que le ha dado su acción en las calles y su trayectoria hablan por sí solas.  Solo pretendemos exponer lo que muchos han venido denunciando por varios años, la CEE es un club privado de los comisionados electorales del PPD, PNP y del PIP.  Todos sabemos que en una colonia no hay democracia pero, además, la falsa democracia es en realidad una partidocracia vergonzosa.

Uno de los puntos que reportó la Prensa fue que la cantidad de endosos necesarios para cualquier persona que deseara aspirar a un puesto de alcalde, representante o senador por distrito y representante o senador por acumulación, se redujo de 4,000 a 3,000.  Por otro lado, los que aspiren a la gobernación deben presentar 8,000 endosos en vez de los 10,000 que la Ley Electoral les exigía.  Pero lo que hay que resaltar es que esto sólo aplica a los aspirantes en primarias de los partidos políticos.  Todo ciudadano que desee aspirar de manera independiente se le hace requerimientos muy diferentes a los que se les hacen a los bendecidos por la partidocracia.  Sobre esto ningún medio de prensa abundó, pero las denuncias de Vargas Vidot lograron informar al pueblo sobre tal injusticia.  Por ejemplo, mientras el PNP acepta y presenta candidatos acusados de pedofilia y la Reforma Electoral le exige tan solo 3,000 firmas para poder correr en primarias y luego presentarse en las Elecciones Generales, a Vargas Vidot la deforma le exige presentar más de 55,000 firmas.

Ese número mágico de 55,000, diseñado para sacar del panorama a los candidatos independientes a Cámara y Senado se vuelve más especial e injusto cuando es, aproximadamente, lo que se le exige el PIP y se le exigió al Partido del Pueblo Trabajador (PPT) para inscribirse.  En resumen, a Vargas Vidot le cortan las aspiraciones exigiéndole más de 55,000 firmas, mientras que a la franquicia pipiola y al PePiTo se les exige lo mismo por inscribir partidos a nivel nacional que, además tendrán acceso a millones de dólares de fondos públicos a través del fondo electoral y del fondo de campaña y cientos de puestos de trabajo en la CEE.

Ante las denuncias de Vargas Vidot, el pueblo se ha hecho eco y ha entendido lo justo de sus denuncias.  ¿Qué está haciendo el PIP? El PIP se ha quedado calladito por dos razones.  Primero, al reino de Rubén Berríos no le conviene que un candidato de la talla de Vargas Vidot aspire al Senado por Acumulación ya que es una amenaza real a las aspiraciones de Juan Dalmau a la misma posición.  Demás está decir que Vargas Vidot supera por mucho a Dalmau quien se ha distinguido en los pasados años por aspirar a diferentes puestos en las elecciones y luego regresar a su bien remunerado puesto como Comisionado Electoral del PIP en la CEE donde también gozaba de auto pagado por el pueblo y hasta de un empleado que utiliza como su chofer personal.  En segundo lugar, al PIP no le ha quedado más remedio que desligarse en lo posible de este asunto ya que no puede hablar mal de Vargas Vidot, le quedaría demasiado feo.  Este es un asunto al que el PIP huye en momentos en que la candidatura de María de Lourdes a la gobernación está pasando sin pena ni gloria y su dupleta a Cámara y Senado es una de las más flojas en décadas.

Finalmente, si la partidocracia no permite que el nombre del doctor Vargas Vidot aparezca en la papeleta como candidato independiente, el pueblo puede todavía votar por él por nominación directa o write in.  Esta posibilidad dificulta las posibilidades de llevarlo al Senado, pero el pueblo podría aún así abofetear la partidocracia y hacer historia.  Sin embargo, queda la interrogante de quién va a velar los miles de votos que recibirá Vargas Vidot.  El precedente del robo de miles de votos a Neftalí García en 1996 en las propias mesas de escrutinio de la CEE hace desconfiar de los cabros azules, verdes y rojos velando las lechugas.  Al PIP, como a los otros partidos, se le ve la costura.